Googleé tu nombre, si se puede elevar a calidad de nombre propio el nombre de una cuenta perdida en un algoritmo. Podría preferir seudónimo, pero quiero priorizar referirme a la identidad creada y no al creador detrás de la identidad.
Te distinguí entre un mar de bots, tu nombre no es como el de @roxy667_98kk. De todos modos no sé que hacía distinguiendo personas entre bots, para serte completamente sincera.
Walco James, imagino que es un nombre macho.
El primer resultado es la cadena de venta de electrodomésticos uruguaya.
El segundo es el perfil de Linkedin de un tal James Mcbeth, que parece ser el Purchasing & Logistics Manager de Walco Equipment Ltd. que al parecer es una distribuidora de equipos agrícolas de césped y jardín de línea corta, productos industriales, control de carga y cadena de neumáticos.
Walco James, la simbología de tu nombre sigue siendo masculina, maquinal y seca.
Me di cuenta de que eras una persona por lo curada que estaba la imagen de tu perfil privado que no me seguía. Cero publicaciones, tres seguidos, cuatro seguidores y mi solicitud eternamente pendiente.
Creo que estás enamorado de mi amiga Luisa.
Tu descripción es un emoji de un virus informático violeta, dando cuenta de tus sospechosas actividades en la web, tales como intrigar a muchachas inocentes.
Tu foto de perfil es un pasto verde ondulado hecho por computadora.
Walco, qué mirada tan exquisita, mitificando la internet como si ya no existiera, como si la encontrasen unos humanos del futuro y se preguntaran quién era esa deidad omnipresente en la que casi todos estaban inmersos, multiplicándose y desdoblándose como las primeras células procariotas. Majestuosas y complejas células.
Cuando me viste las historias fantaseé que eras un hombre que me gusta al que tengo eliminado. Pero creo que a él le faltaría inteligencia para crearte, Walco, él sólo puede sentir y tocar la guitarra. Fascinantes y divinas células. Matemática, biología y emoción.
Luisa me dijo que te había bloqueado hace un año por hacerle lo mismo, de ahí que pienso que a la que querés verdaderamente es a ella.
Tengo el corazón roto, Walco, creí que podíamos llegar más lejos. Como siempre, Walco, me miento creyendo que los hombres pueden llegar más lejos en términos de romance.